La inversión más importante de tu vida
Hola
Hoy os voy a contar una etapa de mi vida en la que aprendí mucho y me tuve que enfrentar a situaciones que ni imaginaba que me pudieran ocurrir a mi.
Es una inversión importante que hice en mi vida, construir una casa, y aunque no se trata de finanzas, si que es parte del dinero que tienes que destinar a una cosa importante en tu vida.
Mi mujer y yo decidimos construir una casa con nuestras propias manos (no, es broma, que voy a construir yo)
Decidimos hacer una casa propia tratando de manejar todas las variables que te pueden ocurrir con constructores, albañiles, marmolistas, pintores, instaladores, electricistas, palistas y decoradores
Fue horrible, pero hoy tenemos una casa a nuestro gusto
Si te estás planteando hacer una autoconstrucción o si te interesa el tema de constructores, obras y no quieres que te explote la cabeza, sigue a Iago.
Es un arquitecto que trata de enseñarte las claves de todo este mundillo para que no te engañen, y que no sufras el calvario que sufrí yo
Quiero saber más del de obras y construcciones de la mano de un experto
El calvario
El calvario fue en primer momento con el Ayuntamiento porque no te facilitan nada y te tratan de tonto.
Mucho papeleo y trámites absurdos que se podrían agilizar si fuéramos más a lo digital. Algunos trámites están digitalizados pero en general es bastante arcaico todo y te eternizas.
Además del Ayuntamiento, decidimos contratar a una arquitecta que no era lo que esperábamos (debió de hacer 2 trabajos en los últimos 10 años) y alguien nos la recomendó y no contrastamos mucho. Primer error de principiante. Hay que tirar de un arquitecto que tenga una trayectoria para que te ayude más.
Esta mujer era bastante desastre y consultaba en google la mitad de las cosas. De hecho, muchas veces se confundía de ayuntamiento y hacía el papeleo para el ayuntamiento que está pegado al mío. Vamos, ¡un desastre!
La fase 1
Empezamos con la licencia, pidiendo presupuestos a distintos constructores (inicialmente creíamos que era mejor no volvernos locos). Pedimos como 6 y al final nos quedamos con unos que nos habían hablado muy bien, pero que son más caros.
Como decimos por aquí, que le calcan al bolígrafo en cada factura.
Bueno, en general trabajaron bien y estamos contentos con el resultado pero lo complicado fue en la fase 2. En la fase 1 hicimos la estructura, cimentación y el tejado de la casa. Una casa de piedra de Portugal, concretamente de PontedeLima (con tonos cálidos)
A partir de ahí, habíamos hecho esa primera parte y paramos porque íbamos a tener nuestra segunda hija (había que centrarse)
La locura de esa primera fase es la cantidad de veces que tienes que ir a la obra para elegir cosas que jamás te imaginarías. Este plástico, estas vigas, estas columnas, e incluso, para ver cómo fijar esa estructura porque nuestro terreno era de “arenas movidizas” (así lo digo yo), pero vamos, que no era super super estable.
Al final, la losa tuvo que ampliarse más de lo previsto con el sobrecargo adicional.
La fase 2
Fue un suplicio. Decidimos tratar de abaratar contactando con instaladores, solados, techos, etc con distintos proveedores.
La coordinación fue complicada y cada uno le echaba la culpa al otro. Si había un conflicto era una odisea y mi mujer y yo nos teníamos que turnar para no estar todo el día enfadados
El desgaste que teníamos era alto porque es hablar con mucha gente y pelearte para que vengan
Toda esta gente está petada de trabajo y muchos no son serios por lo que si quieres que avance, tienes que estar encima
Si tienes una avería, tienes que estar encima y que no te cobren algo extra si tenía que estar bien desde el principio.
Imagínate lo que puede ser que tengas que ir a las 8 de la mañana a la obra para discutir con alguien porque te han hecho una cosa mal y dicen que no lo van a corregir o que queda así o que es culpa de otro que vino el día anterior.
Pues te tienes que cabrear
Vamos, una locura que no se la recomiendo a nadie.
Pandemia y final
Llegó la pandemia y teníamos la casa casi a punto pero no para vivir, quedaban cosas de instalaciones y demás. Tuvimos que estar en el piso en el que vivíamos por lo que sufrimos porque pensábamos en lo bien que estaríamos en la casa que teníamos casi hecha
Finalmente en Septiembre de 2020 entramos en la casa y la disfrutamos desde entonces
Cada vez que vemos alguna nueva obra pensamos, pobres, lo que les espera.
Y esta es la historia resumida de mi experiencia con este tema.
Y tú ¿has tenido una experiencia similar con alguna inversión que has tenido? Al final, cuando invertimos en bolsa, invertimos en una construcción, tenemos un objetivo, que nos reporte ganancias, bien sean económicas (como la inversión en acciones) o anímicas y de bien estar (como lo de una casa)
Cuéntame tu experiencia si ha sido similar.
Buen fin de semana
PD. Si quieres que tu caso con las construcciones sea distinto, lee a Iago que te va a ayudar aquí